lunes, 15 de junio de 2015

Francisco Dominguez Charro

Nació el 22 agosto de 1910 en San Pedro de Macorís.
Murió el 15 de septiembre de 1943 en San Pedro de Macorís.

Sus padres fueron Francisco Domínguez Prieto y Francisca Emilia Charro de Domínguez, inmigrantes españoles; recibía el sobrenombre "Paquito", diminutivo para distinguirlo del sobrenombre de su padre.

En su poesía se refleja su sentir por el hombre sufrido y explotado; es considerado junto a Federico Bermúdez como uno de los precursores de la poesía social.(1)  También, pertenece al género de poesía afroantillana o negrista.

Trabajó por un tiempo como ingeniero químico en el Ingenio Boca Chica.  Residió toda su vida en la calle Hostos en una casa de madera; esta calle terminaba en el puerto de San Pedro de Macoris, lugar al cual acudía a diario en compañía de su inseparable amigo Mauricio Baez.   Son sus constantes visitas al muelle que hacen crecer dentro de él este sentimiento de repudio al trabajo brutal e inhumano que realizaban los trabajadores en el muelle. Permaneció soltero toda su vida.(2)

Su afección de asma desmejoró bastante su salud; los médicos le sugirieron un cambio de ambiente por lo que se mudó por un tiempo a Santiago donde percibió una notable mejoría, pensando que había vencido su mal.   Sin embargo, tuvo que volver al hogar paterno dos años después. 

Adicional del asma, sufría de varices lo que le provocó la muerte al explotar una vena interna produciendole una hemorragia. Murió a los 33 años de edad.

Sus obras:
Tierra y ámbar. (1940)
América en génitura épica (1942)

Epitafio de Francisco Domínguez Charro (3)


Con 33 años
suma de la vida,
subió al cielo tocando fondo
en el Higuamo, el poeta
Francisco Domínguez Charro.
Cristo le sirvió de inspiración,
y Moreno Jimenes su profeta.
Su obra breve,
entre altos relámpagos
fluye, un arcoiris
taciturno.

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(1) Gutiérrez, F. (1998) Antología histórica de la poesía dominicana del siglo XX, 1912-1995. San Juan: Editorial de la Universidad de Puerto Rico.
(2) Periódico Hoy, (20 de abril de 2008) Recuerdan la mente prodigiosa de Francisco Dominguez Charro, Recuperado de http://hoy.com.do/recuerdan-la-mente-prodigiosade-francisco-dominguez-charro/
(3) Gómez, A. (2004)  Lápida circa: y otros epitafios de la torre abolida.  Santo Domingo: Editora Manatí.

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